Una rápida solución obtuvo Clorinda Balladares, mujer que denunció hace unos días que se sentía “encarcelada” en su propio hogar, debido a que el mal estado de su pasaje – el San Rafael del cerro Rodelillo – le impedía salir de su casa y desplazarse con normalidad. Esto porque debido a una discapacidad y la diabetes que sufre la obligan a desplazarse en silla de ruedas, con la que no podía movilizarse en las veredas y calles sin pavimentar en donde vive.
Al conocer esta situación, el Servicio de Vivienda y Urbanización de la Región de Valparaíso (SERVIU) de inmediato se contactó con la empresa que ejecuta el proyecto “Facilidades peatonales circuito 2, tramos 1, 2 y 3”, para que realizara una obra de mitigación en el sector que permitiera el normal desplazamiento de la vecina afectada.
Municipio no ejecutó obras
El proyecto completo de “Facilidades peatonales” en Rodelillo (en el que está justamente inserto el pasaje de Clorinda) debió haber sido ejecutado por el municipio de Valparaíso, ya que en el año 2012 el Minvu le traspasó los recursos bajo un convenio de transferencia, en el marco del programa “Recuperación de Barrios”. Pero el municipio no cumplió el contrato, dejando la iniciativa con apenas un 60% de avance y varios sectores sin ejecución de obras.
Por ello, a mediados de este año, Serviu puso término anticipado al convenio, exigió al municipio la restitución de los recursos y comenzó la ejecución de todas las obras que quedaron pendientes, las que desde julio de este año se encuentran en plenas faenas. Según la programación del nuevo contrato, al pasaje de Clorinda le tocaba la repavimentación en noviembre. Pese a ello, tras conocer el caso de Clorinda a través de La Estrella de Valparaíso, el servicio solicitó a la empresa que rápidamente ejecutara una mitigación que permitiera a la mujer el fácil desplazamiento desde su hogar a la calle y viceversa, lo que fue cumplido por la firma a cargo del proyecto.
En tanto, para Gillian Gaete, hija de Clorinda, quien vive con ella y la ayuda en sus quehaceres diarios, manifestó que esta medida “es una excelente idea. Ya que por ultimo tenemos algo de qué tomarnos para que pueda entrar un vehículo de locomoción, ya sea un colectivo o la misma ambulancia. Y, estando así, nadie podría entrar. Para nosotros, por último, esta medida precautoria es ideal. Se necesita algo así, por la misma gente que es de abajo que es de tercera edad. No es tanto por nosotros, sino también por la comunidad”.
“Estos recursos son del ministerio y se transfirieron a la municipalidad de Valparaíso para que ejecutara estas obras. Esto ocurrió el año 2012. Pasó un largo tiempo y el municipio no se hizo cargo y tuvo muchas dificultades. Por ello, nosotros como Serviu tomamos la decisión de rescindir este convenio con el municipio, pedirle la devolución de los recursos, licitamos las obras y el proyecto está en plena ejecución, con fecha de término de diciembre de este año”, señaló el Director Regional de Serviu, Carlos Contador.
“Como supimos que la señora Clorinda tenía dificultades para salir y el tramo donde vive todavía no era parte de la ejecución de las obras, ya que por programación le tocaba en noviembre, hablamos con la empresa constructora de manera que se tomaran las medidas de mitigación”, finalizó Contador.